Ruta Laguna del Duque
Ruta: Lineal de 10 kilómetros. Salida: En coche desde La Cañada - Ávila- hasta La Zarza (Solana de Ávila) donde empezamos camino a pie. Viabilidad: senderismo, senderismo con perros. Dificultad: fácil, a ratos moderada. Horas: 8 horas ( incluye viaje ida y vuelta, paradas para disfrutar de las vistas, descansar, comer...)
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Una de las rutas más interesantes a hora y media de La Cañada (Ávila) es la de la subida a la laguna del Duque, en Solana de Ávila. En invierno, por la nieve, en otoño por el color y en primavera por la interesante variedad de flora que presenta, donde destacaríamos enormes ericáceas, brezales en flor, tanto rosas como blancos (calluna vulgaris).
Esta laguna también conocida como la laguna de Solana, se encuentra en la vertiente oriental del pico Calvitero (2.401 metros), que otros llaman el Torreón, inmerso en las graníticas sierras, que la gente de Béjar dicen de Béjar; los de Candelario, de Candelario; la gente de Solana de Ávila, la Solana de Ávila; y geógrafos/as, para que haya aún más variedad, macizo occidental de Gredos, está situada a 1.600 metros de altitud; esta sierra es prolífica en charcas de origen glaciar, la mayor de las cuales, la del Duque, tiene 27 hectáreas y es tres veces mayor que la laguna más conocida de Gredos, la Laguna Grande.
Salimos de La Cañada en dirección a Solana de Ávila, una vez allí, por aquello de agrandar la ruta, decidimos iniciar camino desde La Zarza, hacia el paraje Las veguillas, por un camino forestal, bajando a “capón” por la senda del arroyo Honda, más o menos este tramo son unos tres kilómetros; hasta llegar al camino que es de cemento y grava.
La senda no tiene pérdida pese a no estar señalizada. Continuando por ella en dirección poniente legamos a la central de Zanburdán, donde descansamos en los canales de agua, que corrían bastante caudalosos y “alegres”. Tras el descanso, continuamos camino por la senda de grava hasta llegar a la Central hidroeléctrica de “El Chorro” . Este es , en teoría el inicio de la ruta, ya sí, señalizada, y lugar de aparcamiento para vehículos.
Desde allí, a mano izquierda comienza un nítido sendero, que está señalizado por hitos e identifica la senda PR-AV 41.
Se sigue por el camino, subiendo de manera importante un desnivel de 250 metros de ascensión continua. Sabremos que vamos bien porque tenemos que pasar por dos veces por debajo de las enormes tuberías de agua que llevan el agua de la laguna a la central hidroeléctrica, que siempre quedan a nuestra derecha y cuyo nombre se lo debe al macizo del chorro.
Una vez a 1652 metros ya se divisa en toda su magnitud la laguna, que puede ser explorada a placer en sus dos kilómetros de ribera, especialmente bella y bravía allí donde desemboca, procedente de la cima del Calvitero, el arroyo Malillo, entre cantos rodados y enormes bloques desgajados por los hielos que excavaron esta hoya hace 50.000 años y creando bonitas cascadas.
La laguna tiene desde los años veinte del siglo pasado un muro de contención para embalsar el agua y como se ha dicho canalizarla hasta la central hidroeléctrica de El Chorro, ya que fue represada para el aprovechamiento energético del agua en el año 1925 por Hidroeléctrica Navarra, bajo la dirección del ingeniero de caminos Emilio Azarola; el agua llega a dicha central por unos enormes tubos que destacan sobre el granito que soporta la laguna. Aunque parte del agua abandona la laguna por los tubos, la mayor parte se libera libremente y baja por una ladera de granito en la cual se forman grandes y hermosas cascadas.
Como se ha indicado, los dos principales macizos montañosos situados en el oeste de la meseta castellana, Gredos y las sierras Segundera y Cabrera contienen un buen número de lagunas, casi todas de origen glaciar y están situadas sobre rocas ácidas (granitos, gneis o pizarras) o bien sobre sedimentos arcillosos. Son en su mayor parte lagunas pequeñas, en las que se forma durante buena parte del invierno una capa de hielo que las cubre: los lagos de la región de Gredos están por lo general a mayor altitud que por ejemplo el de Sanabria. Sin embargo, el de Sanabria tiene el honor de ser el mayor lago natural de la Península Ibérica y en uno de los mayores de toda Europa (siendo el mayor de origen glaciar).
Esta laguna del Duque originada en el Pleistoceno Superior y una profundidad de más de 22 metros les oligotrófica, con características físico-químicas similares a las de Sanabria, pero donde el zooplancton es muy pobre, reducido a Daphia longispinu y a veces Tropocyclop.r prasinu~. Otros crustáceos presentes con frecuencia son Eucyclopr serrulatus. Macrocyclops albidus y Chydoru sphaericus, todos ellos de las orillas. La vegetación palustre está constituida sobre todo por especies de alta montaña; isoetes boryana, sparganium angustifolium, Sabularia ayuatica y Callitriche palustri, también en las orillas.Sin embargo, la flora montana es variada. Desde brezos, jacintos silvestres, violetas, hasta pasando, claro, por los cytisus.
